La Hemofilia

Hemofilia es cuando la sangre no se coagula normalmente. La hay de dos tipos. Uno de ellos es hereditario y se transmite a los hijos varones. Hoy un hemofílico puede hacer una vida normal, solo tiene que advertirlo si va a tener cirugía. Otra cosa es que tuviera hemorragias internas. O tuviera un accidente de circulación y tardaran mucho en atenderle, podría morir desangrado.

Hoy es una enfermedad bastante infrecuente. Y se puede controlar médicamente.

Los judíos se dieron cuenta en el siglo II, al hacer la circuncisión a algunos niños y estudios de la época a sus familias, acordaron, no hacer a los miembros de la misma la circuncisión. A principios del siglo XIX, un médico norteamericano, Jhon Conrad Otto, descubrió la genética de la hemofilia A. Madres sin problemas, engendraban niños hemofílicos. En 1995 se realizó el primer tratamiento para reemplazar el factor debilitado.

Al principio del siglo XX la esperanza de vida era de 13 años. Cuando el varón hereda un cromosoma con un gen dañado, puede tener esta enfermedad.

En cada célula hay 46 cromosomas, 23 del padre y 23 de la madre. Hoy, puede haber un caso cada 5.000 nacidos.

¿Por qué se hizo famosa esta enfermedad? Porque la Reina Victoria de Inglaterra y su nieta, eran transmisoras de esta enfermedad. Esto supuso que Alfonso XIII y su mujer la Reina Victoria Eugenia, padecieran este problema, pues la Reina también era nieta de la Reina de Inglaterra y tuvo mucha incidencia en sus hijos.