jueves, 7 de octubre de 2021

17 de enero de 1966.- El día que podía haber desaparecido del mapa, media España.

 

¿Las culpables? 4 bombas atómicas que cayeron al mar cerca de un pueblecito de Almería.

Palomares es un pueblecito almeriense, de apenas mil habitantes en ese momento, cerca del mar. Allí Francisco Simó, estaba pescando con su barca, cuando fue testigo presencial del choque y explosión de dos aviones norteamericanos, viendo caer al mar, cerca de él un proyectil que enseguida se sumergió en el mar.

 Este pescador, llamado a partir de ese momento “Paco el de la bomba”, fue testigo de un suceso que podía haber causado una gran desgracia, pero que no pasó nada, al menos de momento.

 Cuando aquel avión B-52, se puso a recibir carburante de un avión cisterna KC-135, en vuelo, y sin saber muy bien que pasó se ve envuelto en la explosión del aparato, causando 7 muertos de los 11 tripulantes. y cae partido en dos en las aguas del Mediterráneo, soltando su contenido en el mar, 4 bombas atómicas setenta y cinco veces más potentes que las de Hiroshima, podéis imaginar lo que podría haber pasado .Los restos de los aviones cayeron sobre todo el pueblo, por las calles, los jardines y los campos.

 Uno de los proyectiles cayó en el mar, otro en el río Almanzora, el tercero en un cerro desértico produciendo un cráter de 6 m de diámetro y 2 de profundidad y sus restos esparcidos en 100 metros. Y la otra en el casco urbano del pueblo.. Uno suavemente con su paracaídas y los otros dos, no se abrió bien y resultaron dañados, soltando así radiactividad.

 Hoy día aún se desconoce las consecuencias que tuvo para las personas estar expuestas a la radiación, ni las indemnizaciones que hubo.

 La ignorancia de la gente en estos tiempos, unido a minimizar el suceso en las autoridades franquistas, no se trató la noticia con la gravedad que requería la cosa.

 No explotaron. Parece que llevaban un sistema de seguridad que funcionó, pero contaminaron unas 250 Ha de terreno, cerca de la costa.

 Estados Unidos intentó archivar el tema, no nos debían considerar importantes., pero España insistió en repatriar las tierras contaminadas.

 La cuarta bomba, que cayó en el mar, había que encontrarla. No se podía dejar ahí y que explotara y desapareciera el Sur de Europa.

 Dos meses después de empezar a buscar la cuarta bomba, aparece a 800 metros de profundidad a más de ocho kms de profundidad. Las autoridades hicieron caso al pescador, que había sido testigo de ello.

 El entonces Ministro de Información y Turismo de Franco, D. Manuel Fraga Iribarne, decide para salvar el Turismo de ese año, bañarse en esa zona, para que la gente vea que no pasa nada. Con la desinformación organizada por el Gobierno, dan como lugar del baño, dónde cayó la bomba, pero la realidad es que se bañó quince kilómetros más lejos de Palomares. Pero la contaminación además, no estaba en el mar, sino en la Tierra y en el pueblo..

 España mandó a la Guardia Civil a salvaguardar la zona, allí sin hablar inglés, se encontraron con miles de soldados americanos y especialistas con trajes radiactivos. La España de la boina y la potencia nuclear. Hoy se han desclasificado esos documentos y como Estados Unidos utilizó la dictadura contra la amenaza roja nuclear de Rusia.

 Diez años más tarde constructores sin escrúpulos quisieron construir en esas tierras urbanizaciones para el verano. Debían tomarse a broma lo de la radioactividad, pero la presencia de plutonio y americio (1) . era tan alta, que tuvieron que declarar la zona, no edificable.

 En 2015, casi veinte años después, se acordó con Obama limpiar ese suelo y tratarlo en el lugar apropiado. Pero la mala suerte fue que cuando subió al poder Donald Trump, declaró no estar comprometido con lo que había ofrecido Obama.

  En 2016, el Ministro José Manuel García-Margallo, firmó en EEUU, una decla-

            ración de intenciones llena de imprecisiones y que contando con la buena    

             voluntad de Washington, se regenere esa zona para recuperar su estado

             previo al accidente, y que los terrenos fueran aptos para cualquier uso.

             Yo estuve en Villaricos, provincia de Almería en 2010. Todavía había zona de tierras alambradas y yermas totalmente.

 Hubo un incremento de muertes por cáncer y leucemia entre los habitantes de

           la zona costera y entre los que emigraron a Cataluña. También malformaciones      

            en animales y recién nacidos,

 Hoy en 2021, sigue siendo un tema tabú. Las mentiras y el secretismo se llevan      

          la mayor parte  de la información de lo que pudo ser una gran tragedia.

                       Es una zona que sigue estando contaminada y creen que lo estará

             hasta 2040.

 Informaciones de los periódicos españoles, y artículos periodísticos.

 

(1)  El plutonio es un metal radiactivo, plateado, muy tóxico por su alta radiactividad. Se puede acumular en los huesos. Se acumula en la médula ósea.

(2)  El americio: es un elemento radioactivo, creado por el hombre, puede producir cáncer en los huesos

 

 

 

 

 

 

 

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario