miércoles, 15 de octubre de 2025

La Encerrona

 Realmente, no fue una encerrona. Pero era una forma de captar vuestra atención.  

Hace unos meses asistí a una especie de Charla-Debate sobre como enseñar Historia. En una ciudad cercana a Madrid. Cuando llegué al Centro, en el que supuestamente no conocía a nadie, un centro privado, reconocí al profesor que iba a llevar el acto, como un compañero mío de otras actividades, con quién no siempre habíamos estado de acuerdo, no obstante, me acerqué a él para saludarle. Lo cierto es que se sorprendió que fuera allí, pero enseguida reaccionó y me sorprendió al invitarme a subir con él al estrado, para intervenir desde mi experiencia dando clase de Historia.

El "público" asistente era mayoritariamente alumnos de Bachillerato, algunos con muy poca gana de estar allí y algunos, supongo que profesores o profesoras.

Mi compañero inició el acto con una breve introducción y para mi asombro, me pasó inmediatamente el micrófono para que siguiera yo con el tema.

Por eso decía que era una encerrona. Pero, cuando dominas una materia que encima me gusta muchísimo, no necesito prepararme nada, para estar hablando horas y horas de temas históricos.

Para atraer la atención de los estudiantes, comencé así:

"El viernes pasado, iba yo en el autobús y delante de mí iban dos chicas como de unos veinte años, hablando en voz alta de sus cosas, no las estaba haciendo caso, pero en un momento dado, una de ellas me llamó la atención, porque le dijo a la otra, algo sobre el tema que estaban hablando, le dijo, que lo había visto en tiktok. Y ya, al verlo en esa Red Social, es considerado por algunos jóvenes, como Verdad Verdadera. Han aparecido en nuestros móviles, unas personas, que se llaman Influencers, así en plan inglés, que en algunos casos sacan un tema y te lo explican como si tu fueras tonto, en unos pocos minutos. El problema es que para muchas personas de nuestra sociedad es un tema interesante porque lo desconocen y así, en un plan efectista, y en minuto y medio, te ponen al día. 

Antiguamente, a lo mejor a estos "Influencers" les llamarían caraduras, porque algunos, solo saben lo que han leído y te lo cuentan como si supieran mucho más."

Y les dije :" El profesor de Historia, tiene que ser un "Influencer". No hay asignaturas aburridas. Hay profesores aburridos. " Ante esta afirmación, muchos de los alumnos, dejaron de mirar sus móviles, para hacerme algo de caso. Seguí:" Este país tiene una manía. Hay un refrán español que dice que ""A los santos, o se les dan abrazos o les matan a porrazos"". Y es que somos un país pendular. Aquí no hay término medio. Hace muchos años, la enseñanza era memorística. Nos sabíamos, la lista de los Reyes Godos, los Concilios de la Iglesia, las Bienaventuranzas, Los países del Mundo y sus capitales...

De eso, pasamos en una ley posterior a no memorizar absolutamente nada. A rellenar unas hojas de ejercicios que llamaban fichas y a "creer" que de esa forma, ya se sabían todo. Y así te encuentras hoy día, que en Redes Sociales, tik tok, Instagram o Twitter, sale un entrevistador preguntando cosas elementalísimas y los jóvenes no tienen ni pajolera idea de lo que les dicen.

Señores, ni todo de memoria, ni nada de memoria.

Hay cosas que es necesario saber. Los ríos de España, y donde están, geografía de tu país, por ejemplo. En Historia, también se ha abusado de esto. De tener que saberte de memoria todas las dinastías reales, con quien  se casaron, como se llamaban sus hijos, etc, etc, batallas y guerras, que acababas con un cacao tremendo. De todo esto lo único que nos puede importar es quién reinó y algo importante de su reinado. El resto lo puedes encontrar en Internet. Y eso sí, hacer pensar e investigar, opinar y hablar al alumnado.

Dije al principio, que lo que había era Profesores Aburridos. Una persona que entra en el aula y dice, sacad el libro, página 49, a ver Pepito, empieza a leer, o lee ella misma la lección, no es un profesor, puede ser el Conserje, la Sra de la Limpieza, o el conductor de Uber."

Aquí empezaron a haber risitas en los asistentes y miradas diversas, y algunos profesores empezaron a hacer gestos de desagrado.

"El profesor de Historia, dije, tiene que ejercer de Influencer, presentar el tema, que puede ser un rollazo, de forma que pueda ser agradable, aunque tengas que dar una patada al libro y tratar el tema desde otro punto de vista. Y sobre todo, que piensen. De que me sirve que se sepan la vida del Rey de turno, si no son capaces de saber la evolución de ese reinado o las razones por las que llegó ahí, o porqué pasaron de un estilo arquitectónico a otro?

Nos quejamos de Internet, pero bien usado, puede ser interesante. Cuando estoy explicando un tema, sé que mis alumnos, aunque esté prohibido, tienen todos el móvil en el bolsillo. Y yo puedo explicar el Culteranismo y el Conceptismo y saber lo que explico, pero lo que quiero es que ellos investiguen. Así que les digo que saquen el móvil y que los de la fila izquierda busquen lo que es el Culteranismo y autores principales y que los de la derecha hagan lo mismo con el Conceptismo, y es más que hablen de una idea y otra, den sus opiniones, o digan lo que quieran. También les sugiero que huyan de la Wikipedia y de las primeras entradas de la búsqueda. 

Es importante que investiguen, porque en la enseñanza tradicional, para lo único que usan Internet es para hacer copia-pega de "El Rincón del Vago". Y eso no me sirve. Si trabajan así, no lo olvidarán nunca"

Llegados a este punto, mi compañero, me hizo una señal, para que parara la disertación y hacer un breve descanso. 

En ese descanso, los profesores fueron a hablar con mi amigo, supongo que para ponerme verde y los alumnos y alumnas se acercaron a mí en masa, para ver si podía dar más charlas de ese tipo o incluso alguna clase. 

Pero, creo que éste no vuelve a llamarme. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario