Al principio se llamaba Orden de San Juan del Pereiro, más tarde adoptó la Regla del Cister y fue engrandecida por el Papa y el Rey Fernando III con libertades y privilegios. Posteriormente el Papa Lucio III la puso directamente bajo la custodia de la Santa Sede, para defender la Fe y para luchar siempre contra los musulmanes.
Llevaban una túnica de lana blanca muy larga, y una capa negra que tornaban por un manto blanco en las grandes solemnidades. Su blasón era un peral sin hojas y mostrando las raíces. Más tarde lo cambiaron por la cruz flordelisada.
En tiempos de paz permanecían en su convento. Tuvo su sede en la Villa de Alcántara en Cáceres.
Después de una serie de problemas internos, fue incorporada a la Corona por los Reyes Católicos. En el siglo XVI se autorizó el Casamiento de sus componentes. Hasta 1808 tenían 35 comendadurías con 53 villas y aldeas, dos Conventos y un Colegio en Salamanca.
La Primera República suprimió esta Orden en 1873, pero Alfonso XII, la reinstauró dos años después.
BIBLIOGRAFÍA: http://www.heraldaria.com/
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